En el tablero político bonaerense, La Libertad Avanza comienza a delinear con claridad dónde pondrá sus principales fichas de cara a la campaña electoral. Entre los distritos del conurbano, uno se destaca con nitidez: Moreno.
Lejos de ser un municipio más, Moreno se consolidó como la organización política más fuerte que el espacio libertario tiene en la Provincia de Buenos Aires. La magnitud de su estructura, la capacidad de movilización y el peso de sus referentes locales lo ubican en un rol central dentro del armado provincial. No es casual que, en los pasillos libertarios, crezca cada vez más la idea de que allí se realice el cierre de campaña bonaerense.
El contexto provincial: Milei y el peronismo, cabeza a cabeza
A nivel provincial, las encuestas muestran una carrera muy ajustada entre La Libertad Avanza y el peronismo, que aún conserva peso en el conurbano. El oficialismo provincial busca retener su bastión histórico, mientras que Milei apuesta a quebrar ese dominio con un discurso frontal contra el kirchnerismo.
La estrategia libertaria combina dos elementos: por un lado, el mensaje nacional polarizante de Javier Milei, con consignas como “Kirchnerismo nunca más”; y por otro, la consolidación de estructuras locales en distritos clave que permitan traducir la adhesión presidencial en votos concretos. En ese esquema, Moreno emerge como el epicentro bonaerense de la expansión libertaria.
Un territorio con músculo propio
La potencia territorial de LLA en Moreno quedó en evidencia la semana pasada, cuando en la localidad de Trujui —considerada el corazón popular del distrito— se realizó un acto que reunió a más de 4.000 personas. El encuentro fue leído como una clara demostración de convocatoria y como la confirmación de que el municipio es hoy el epicentro libertario en Buenos Aires.
La organización no es improvisada. LLA Moreno cuenta con más de 10 sedes y locales partidarios distribuidos en el distrito, lo que le da presencia permanente en los barrios y marca una diferencia frente a otras fuerzas políticas. A ello se suma la incorporación de dirigentes con fuerte arraigo territorial, que todos los días trabajan en los barrios para consolidar al espacio como una expresión popular en ascenso.
Dirigencia y validación electoral
El distrito cuenta con una conducción política clara: el diputado provincial Ramón “Nene” Vera y la coordinadora de la primera sección electoral, la doctora Andrea Vera, quienes lograron darle cohesión y dirección al proyecto libertario en la zona.
En las elecciones de 2023, Andrea Vera fue candidata a la Intendencia de Moreno y protagonizó un hecho político de gran relevancia: su desempeño en las urnas fue el que más se acercó, en términos porcentuales, al resultado obtenido por Javier Milei en la elección presidencial. Ese dato ratificó su capacidad de representar al electorado libertario y la convirtió en una de las dirigentes con mayor validación electoral dentro del espacio bonaerense.
La pulseada simbólica: libertarismo vs. kirchnerismo
En Moreno se expresa con nitidez la disputa entre dos modelos de país: por un lado, el modelo de La Libertad Avanza, que se presenta como el del trabajo y el esfuerzo productivo; y por el otro, el del Movimiento Evita, identificado con el kirchnerismo más duro y con un esquema de organización piquetera. Esta confrontación hace del distrito un territorio clave para entender la pulseada bonaerense y nacional.
La narrativa libertaria busca mostrar que es posible torcerle el brazo al kirchnerismo en su propio terreno, un mensaje que resuena más allá de las fronteras del municipio y que puede proyectarse como símbolo de la batalla electoral.
Estrategia y proyección nacional
Desde el punto de vista estratégico, Moreno ofrece ventajas que lo convierten en el corazón político de Buenos Aires para LLA. El distrito combina volumen electoral, simbolismo territorial, dirigencia con arraigo popular y una conducción local alineada con la proyección provincial.
Si Buenos Aires es la llave de cualquier elección presidencial y el conurbano su núcleo más competitivo, Moreno aparece como el distrito capaz de proyectar la fuerza libertaria desde lo local hacia el escenario nacional. Allí podría no solo cerrarse una campaña provincial, sino también abrirse la puerta a la consolidación definitiva del movimiento libertario en la política bonaerense.

