La devaluación del 22% decidida por el Gobierno Nacional el pasado 14 de agosto, inmediatamente después de las PASO, sumada a una inflación descontrolada que desde enero hasta julio de este año llegaba a un 60.2% (con una variación interanual del 113%), añade sufrimiento a los ciudadanos y empobrece a las familias. Las cuentas del Municipio no están exentas de esta compleja situación.
“Es uno de los momentos económicos más delicados que vivimos” expresó el Intendente Municipal Nahuel Mittelbach el miércoles 23 de agosto, en un comunicado en el que explicó la situación financiera municipal en este grave contexto de crisis que atraviesa el país.
Por un lado, el Gobierno de la Provincia adeuda recursos a los municipios por obras y servicios que fueron brindados pero que no han sido pagados. Por otro lado, los recursos que recauda el Gobierno de la Provincia mediante impuestos, y que son destinados a la coparticipación, no han aumentado al ritmo de la inflación, lo que provoca pérdidas importantes para los Municipios.
En Florentino Ameghino, a la deuda de más de 56.5 millones de pesos que mantiene el Gobierno Provincial con el Municipio -entre falta de pago de obras de infraestructura y prestaciones del IOMA- se suma ahora una reducción de 15 millones de pesos procedentes de la coparticipación.
Preocupa también al gobierno local que esta situación se repita en numerosos programas que dependen de esos recursos. Por ejemplo, en los recursos insuficientes que enviaría la Provincia de Buenos Aires para cubrir los gastos de la delegación ameghinense que viajaría a la ciudad de Mar del Plata para participar en la final provincial de los Torneos Bonaerenses.
Tal como afirmó el Intendente Municipal “en momentos de crisis es fundamental que los gobiernos expliquemos la situación a los vecinos con valentía y digamos cuál es el camino para transitar esta tormenta”.
El Gobierno local ha decidido poner en marcha una serie de medidas centradas en garantizar prioridades como atención a la salud, barrido y limpieza, alumbrado público, mantenimiento de
caminos rurales y salarios de empleados municipales y en reducir el gasto público, con medidas de austeridad como disminución de los bienes de uso y consumo, suspensión temporaria de la ejecución de obras financiadas con recursos del municipio y suspensión de viáticos de todos los funcionarios de planta política.
La repentina devaluación, la deuda provincial con los municipios bonaerenses y la reducción de los fondos de coparticipación no permite hoy ejecutar el aumento de sueldos a los empleados municipales que tenía previsto hacer el Municipio, pero la prioridad es mantener en lo posible su poder adquisitivo.
“Vamos a hacer un esfuerzo enorme en una circunstancia crítica para aumentar todo lo que sea posible el sueldo al empleado municipal” enfatizó Nahuel Mittelbach en su comunicado a la
comunidad.
“Tengan la tranquilidad de que vamos gestionar cada peso de los vecinos con absoluta responsabilidad y prudencia, pensando siempre en el bienestar de la mayoría.”