Un niño de 5 años resultó gravemente herido durante las Fiestas Patronales de Diego Gaynor y logró sobrevivir gracias a la rápida atención recibida en el Hospital Municipal “San José” de Capilla del Señor, un centro sanitario que volvió a ser destacado como referencia en la región.
“A mi sobrino, en el Hospital Municipal San José le salvaron la vida”, aseguró Oscar Huber, tío de Jairo, al relatar el dramático episodio ocurrido el pasado 10 de agosto.
El accidente en plena fiesta
En medio del desfile y las actividades patronales, Jairo sufrió una herida punzante en el abdomen al caer accidentalmente con un cuchillo en la mano. “La herida rompió los intestinos y una parte del bazo. Era cuestión de vida o muerte”, explicó Huber.
De inmediato, una ambulancia del sistema de salud de Exaltación de la Cruz llegó al lugar en menos de cinco minutos y trasladó al menor de urgencia al hospital de Capilla del Señor.
Atención de urgencia y cirugía salvadora
En el “San José”, los médicos constataron la gravedad del cuadro y realizaron una cirugía de emergencia para detener la hemorragia y reparar los órganos dañados. La intervención fue exitosa y permitió estabilizar al niño.
“Quien o quienes lo operaron se jugaron la vida. Era una cuestión de vida o muerte”, remarcó el tío, agradeciendo la entrega y profesionalismo del equipo médico.
Derivación y recuperación
Una vez superada la etapa crítica, el sistema sanitario local articuló con la Región Sanitaria V para disponer de una ambulancia de alta complejidad y trasladar al pequeño al Hospital Interzonal General de Agudos Eva Perón (ex Castex), en San Martín. Allí permaneció internado diez días, hasta recibir el alta.
Hoy, Jairo se encuentra en su casa en Los Cardales, recuperándose y retomando de a poco su vida cotidiana, aunque por recomendación médica todavía no volvió al jardín de infantes.
Un hospital de referencia
El caso volvió a poner en valor la labor del Hospital Municipal “San José”, que en los últimos años fortaleció su capacidad operativa, infraestructura y aparatología, siendo considerado una política de Estado en materia de salud por la gestión municipal.
“El Hospital actuó de una forma ejemplar y les agradecemos a todos los que allí trabajan, porque lo hacen con experiencia, empatía y humanidad”, concluyó Huber, emocionado por el desenlace positivo que tuvo la experiencia más difícil que vivió su familia.